miércoles, 30 de abril de 2008

La influencia del ciberperiodismo

La velocidad que inunda nuestras vidas está provocando un cambio de rutinas. Las tecnologías ya son parte de nuestra vida cotidiana y muchos de nosotros no sabríamos cómo vivir sin ellas e incluso dedicamos reuniones, debates y conferencias al mundo multimedia. Así, el pasado 23 de Abril a las 9 y media de la mañana en la facultad de periodismo de la Universidad Complutense de Madrid comenzó el III Congreso Internacional de Periodismo en la Red que estuvo presidido por Mª Carmen Fernández, vicerrectora de la UCM.

El inicio de las sesiones de estas jornadas estuvo marcado por la ausencia de Carlos Berzosa, rector de la Complutense, y de Javier Devara, decano de la Facultad. Además, los graves problemas técnicos de audio que duraron una media hora retrasaron y disturbaron el comienzo del Congreso.

Fue Jean François Fogel, director de Le Monde, el que, en pie y a gritos, el que habló sobre la historia que el periodismo ya tiene en la Web. Tras haber superado las primeras redacciones en Internet y la creación de los, de sobra conocidos, motores de búsqueda, actualmente nos encontramos ante la "Web 2.0. en la que todo lo que existe en ella es de la audiencia". Estamos ante un cambio en la profesión periodística en el que los modelos emergentes de información están basados en el desarrollo de los blogs, wikis, redes sociales, etc.

El devenir del periodismo

El futuro de los medios de comunicación y el desarrollo del periodismo en nuestra sociedad supone nuevos planteamientos con cambios en la formación de los profesionales, y que los medios se reinventen en redacciones más flexibles para la creación de la noticia. La información en la Red debe de ser de tal calidad que aquel “periodismo ciudadano” no suponga una competencia. Los datos y noticias de los periodistas en Internet deben de ser profesionales para que los internautas no lo rechacen.


Según Fogel, el problema principal está en que la audiencia, en Internet, cuenta con las mismas herramientas que los propios periodistas. De esta forma, nos encontramos ante una disyuntiva ya que el ciudadano es activo y publica, pero al mismo tiempo exige información profesional; mientras que los periodistas titulados no pueden permitir que las publicaciones de las masas se las denomine como periodismo.

De esta manera podemos hablar de una enorme y vertiginosa cantidad de cambios en los diferentes ámbitos de la información; desde los géneros y diseños más tradicionales hasta las actuales tecnologías, y desde las fuentes de la propia agenda hasta la masa de públicos. Todas estas supuestas mejoras profundizan la brecha que se ha abierto entre los conectados y los desconectados a raíz de la evolución de Internet. Trae, por consiguiente, el estudio de un nuevo paradigma en el proceso de la comunicación en el entorno del ciberperiodismo: cada vez estamos más habituados a las formas nuevas de interactuar de la sociedad de la información y así parece que tener o no un ordenador nos sitúa dentro o fuera de ella.

Uno de los temas que más preocupó durante el turno de preguntas en la conferencia fue el futuro de la prensa escrita. Fogel aseguró que ningún medio ha desaparecido por la llegada de otro más novedoso, sin embargo, es totalmente necesario que éstos se acoplen a los nuevos. Por lo tanto, es fundamental que el periodismo esté formado por profesionales que conozcan el nuevo papel que les depara la Web como intermediarios de la información y, como consecuencia, productores de conocimiento; en el caso de Internet la actualidad es la primera lección que deben aprender para "ahorrar en inversión".